Justo en esos días cuando quieres estar más en calma porque te duele la cadera o el vientre, tus ganas por ir a orinar a cada rato se vuelven más fuertes. Es algo incómodo porque aunque no tomes mucha agua necesitas ir al baño. 

Es normal que tengas más ganas de ir y tiene que ver con las hormonas, progesterona y prostaglandina. Esta última hace que el útero se contraiga cuando no hay embarazo, se desprende el endometrio y comienza el periodo menstrual.

Ese movimiento de contracción hace que empuje al intestino y los riñones, eso provoca que tengas más gases, quieras ir constantemente a evacuar y orinar.

Cuando no hay periodo menstrual la producción de progesterona pueden provocar estreñimiento en los demás días del mes por eso puedes sentir que tienes un metabolismo lento.

No es malo que te ande más del baño, al contrario, sirve para que tu organismo se limpie. Solo procura aguantarte lo menos cuando tengas ganas de ir al baño, no ir cuando sientes la sensación puede provocar daño en tus riñones, vejiga y sufrirás de estreñimiento.

¿Qué tan seguido vas al baño cuando estás en tu periodo?